Juan Ga y el rock pop latinoamericano


Juan Ga, reliquia de Hawaii

Recibí la noticia del fallecimiento de Juan Gabriel vía mensaje de texto de la directora de programación. Sentí un pellizco en el corazón a minutos de entrar en mi segunda intervención al aire. Justo en este domingo tenía programado compartir un lindo cover de la joven tijuanense Vanessa Zamora, quien recientemente versionó “Amor eterno” con una coqueta línea de folk pop pegajoso a través de su dulce voz. Tal como Zamora, crecí escuchando a Juan Gabriel en casa, fue por mis padres aunque puedo precisar que mi mamá es la que más me conectó con esas rolas clásicas como “El Noa Noa”, “No me vuelvo a enamorar”, “Hasta que te conocí”, y muchísimas otras de las más de 1, 000 canciones que compuso Juan Ga en el transcurso de su trayectoria que comenzó a temprana edad. Recuerdo cassettes con estos temas clásicos, a veces sonaban en la radio o en las calles de México, o en el tarareo íntimo con mi walkman, inclusive hasta formaron parte de algunos mixtapes que regalé. También recuerdo los karaokes con amigos donde no faltaban esas canciones desgarradoras y divertidas del divo de Juárez. Casualmente, a principio de año durante un viaje terminé adquiriendo un cassette de éxitos de Juan Gabriel en una tienda de discos en Maui, Hawaii junto con otro de Rocío Dúrcal. ¡Vaya sorpresa encontrar a Juan Ga en el lugar menos imaginable! 

¿Quién no se enamoró o desenamoró con esas rolas tan llegadoras? ¿Quién no ‘tomó prestado’ algún elepé o cassette de Juan Ga de la colección de sus padres? ¿Quién no dedicó alguna de sus canciones o maldijo a alguien con esos temas tan honestos? Cantarle al amor y al desamor no es tarea fácil, es todo un arte que perfeccionó Alberto Aguilera Valadez. Su carrera fue tan prolífica como difícil, se formó con el tiempo y el sudor de su talento. Llegó a trabajar en bares y en las calles por muchos años antes de tener la oportunidad de tocar en un escenario decente. Como hijo de una familia humilde de Parácuaro, Michoacán, las dificultades familiares lo llevaron a Ciudad Juárez. Eventualmente tuvo que enfrentar la vida a la brava mudándose a la Ciudad de México en busca de oportunidades. Y como todo sacrificio, tuvo su recompensa al ser aceptado por miles de almas cuando finalmente tuvo sus primeros ecos después de un primer contrato con RCA Víctor a comienzos de la década de 1970. Y como muchos otros músicos, Juan Gabriel también fue rechazado por muchísimas disqueras antes de posicionarse como uno de los cantautores más prolíficos de América.  

La influencia de Juan Gabriel es innegable sobre todo en la camada de artistas de la música alternativa de Latinoamérica y la audiencia ‘millennial’ que tras este fallecimiento se ha manifestado a través de las redes sociales compartiendo sus covers y nostalgias. A través de los años, músicos contemporáneos lo han versionado espontáneamente, algunos registros se han quedado solo en los escenarios y algunos otros que se han editado en algún álbum. Los covers a Juan Ga se han manifestado a través del rock pop de los Jaguares con “Te lo pido por favor” (El Primer Instinto, 2002) y el de Jorge González de aquella legendaria banda chilena Los Prisioneros con “Querida” en algún escenario santiaguino. 

Como parte del ciclo natural, se nos va otro grande y solo nos queda compartir su legado y transmitirlo a las nuevas generaciones. Aquí les comparto dos álbumes que reflejan la influencia que ha dejado Juan Gabriel en bandas clásicas y emergentes de América Latina. Este primero es un álbum tributo con covers muy acertados a cargo de Vicentico, La Maldita Vecindad, Panteón Rococó, Pastilla, Elis Paprika, y otros que se vale tachar porque como todo, nada es perfecto.

Amo al divo de Juárez: Tributo al Juan Gabriel (SONY/BMG 2006)

  

Para los más clavados, les sugiero pegarle oreja a Juventud Americana (Arca Discos, 2012), álbum debut de la banda chilena Ases Falsos cuyo vocalista Cristóbal Briceño nunca ha negado su enorme admiración hacia el estilo de composición de Juan Gabriel. Inclusive su banda anterior conocida como Fother Muckers llegó a versionar en varias ocasiones rolas como “El Noa Noa” y “Te he prometido” en los bares de Chile. Y además, este hermoso álbum muestra una portada que nos presenta a Juan Gabriel con una expresión muy graciosa con esos destellos en los ojos photoshopeada. Juan Ga nunca imaginó que dejaría un legado tan inmenso en esos rincones del Cono Sur. Tan solo vale preguntarle a Javiera Mena, el dúo Dënver, Fito Paez, etc.

Ases Falsos (Juventud Americana)

Seguramente escucharemos más covers y álbumes tributo a Juan Gabriel que irán apareciendo en las próximas semanas o meses. Mientras tanto ¡vámonos al Noa Noa!

 

Rocío Santos. Productora, conductora y disc jockey en Vocalo 91.1FM (Chicago Public Media) y co-presentadora en WLUW Rock Sin Anestesia 88.7FM.