‘Desordenadas’ no tiene desperdicio

 

Desordenadas de Naida Saavedra
Suburbano Ediciones, 2019, 124 páginas, $16.99, ISBN-13: 978-0998847771

 

De entrada, Naida Saavedra advierte al lector que Desordenadas es una colección de las historias que ha escrito sin que aparentemente exista un tema específico, dejando en manos del lector decidirlo. Podría pensar que el título es una justificación por la aparente falta de cohesión, algo que a cualquier escritor podría poner nervioso, pues con frecuencia, uno escribe sin pensar en temas o hilos conductores. No es así. El tema que permea esta colección de cuentos me pareció que es el miedo —ya sea a la soledad, al rechazo, al qué dirán, al padre, ¡a menstruar!

La doctora Saavedra, venezolana de abundantes cabellos rizados, comienza con una reflexión (aunque ella lo describe como un manifiesto) sobre el uso correcto del idioma y su frustración con “las normas de edición”. Acto seguido, las desecha, con justa razón, y plasma la oralidad del inmigrante como es, sin itálicas y sin comillas, porque así hablan sus personajes, como la “…Latina Writer that she is, pues”. La autora comienza rebelándose contra the Spanish police, porque parece que ésta no entiende que en Estados Unidos el español (¡tan masculino!) está en proceso de mestizaje y para persuadir al lector, hay que empezar por la boca. Los personajes le hablan a la autora y es por eso que las historias “suenan” más reales. Son estos “atracos” lingüísticos lo que les da cuerpo y carácter. El miedo a ser juzgado por “la Academia”, es natural, pero ella no va a dejar que la silencien (¡fucking carajo!).

Los siete cuentos que conforman la obra, dieron pie a una profunda reflexión de lo que es ser un inmigrante, de lo que es ser latino y sobre todo, de lo que es ser mujer. En “Your Shift Is Over” la protagonista va de la casa al trabajo y del trabajo a la casa sin mucho que la anime, como un autómata, mientras se la lamenta por sus ojeras negras, producto del cansancio que la invade, de la varices que le han pronosticado por estar tanto tiempo de pie, y justo cuando se detiene a oler las flores, ocurre lo inesperado. La ironía es tan terrible que quiero pensar que el desenlace es producto de la imaginación de Naida.

Uno de mis cuentos favoritos, “Shampoo and Style”, es la lucha de una muchachita contra su cabello rizado… y su madre. Sospecho que hay algo anecdótico, lo cual es natural, pues el escritor escribe de lo que sabe. Lo que es cierto, es que las mujeres nunca estamos contentas con lo que genéticamente nos corresponde. Si es lacio, lo queremos rizado y si es rizado, lo queremos lacio. El cabello, arma femenina de alto calibre, no siempre alcanza el objetivo deseado y nos pasamos la vida en una batalla capilar, tratando de darle gusto a todos, hasta que por fin llega el día en que alguien nos ve como quisiéramos, y Naida ha plasmado esa aceptación de manera brillante.

“Ultra Soft Plus” aborda un tema exclusivamente femenino, la menstruación, y lo que esto significa: la habilidad de parir, y de parir hijas que algún día tendrán que pasar por ese rite of passage, y quizás, experimentar los estragos del embarazo y el alumbramiento, como en el caso de “No llores mi reina”, donde la protagonista le revela a la hija recién parida, la historia de su origen y de su nombre.

En “Las cuatro Lauras”, el drama familiar de tres hermanas del mismo nombre, y de su madre, es una revelación sicológica del poder que los hombres tienen sobre las mujeres, lo cual se hace más patente aún en “Vos no viste que no lloré por vos”, donde revela los extremos a los que llegamos las mujeres “por amor”.

Desordenadas es una colección de historias escritas desde el desarraigo, que presentan los dramas de los Latinos de manera realista, pero sobre todo, desde un punto de vista fresco, sin adornos, lleno de sentimiento. Desordenadas se puede leer en orden o en desorden, pero sea como sea, no tiene desperdicio.