Perdido

I.

 

Deshago el tiempo para volver a las noches de juventud 

al tiempo de la inocencia y las risas 

cuando el amor no tenía nombre, 

no se definía

y todo era

pulsión

 

cuando no había queer theory

desde la cual denominarnos

 

donde yo no sabía y tú tampoco

pero sí

 

entonces,

habitábamos melodías 

comunicándonos desde un no-saber

con abecedario propio y recóndito.

 

 

II.

 

Immemorial de un inicio

con tu nombre estampado en la orilla de todos mis labios

en cada encuentro con otros cuerpos,

tu mirada

en cada escucha nocturna,

tu canto

en cada llanto,

 

tu huella

 

el aire ingenuo de un

nodecirtenunca

teamo-nunca

de mundos que se repiten.

 

 

III.

 

Inscribirte hoy

lacerada y suspendida

desde una nada común

que ayer abandonó su contención

 

desde Fayetteville

torciono el lenguaje

para mirarme de frente,

y mirarte a ti de frente

 

llegar al epicentro de mi existencia

la que siempre te evocó

y en una danza íntima

decirme tantas cosas.

 

 

IV.

 

De esa quimera que fue mi cuerpo

en tu orilla desobediente de toda verdad

hoy

desocupo el lugar de los mudos

para naufragar en tu olvido

silente de piel y caricia

sin dibujar acasos

 

entonces,

se fragua en la punta de mi lengua

un nombre detenido, incorpóreo

desordenando el tiempo

languideciendo ocasos

para surcar desde la primavera

tu nombre escrito en la tierra.

 

 

V.

 

Grito con la voz de un pasado que ya no nos pertenece

de un ayer cerrado a la potencialidad

derrumbo los muros de la contención

y regreso al gesto eterno de tu anhelo amical 

 

me dejo afectar

por ti,

por todo lo que me desborda

en este momento

de lo inconmesurable

 

complementarias y diferentes

pero de esencia común,

impalpable pero innegable

 

me quiero dejar por ti, 

pasas, sucedes

no me pregunto

 

Yo,

en el centro del mundo 

contigo,

 

abriéndome

 

el universo a mi altura 

porque eres siempre,

algunas veces,

mil veces.