Reina Cristina: La mujer que fue rey

 


The Girl King, de Mika Kaurismäki

De entrada debo aclarar que la historia no es mi fuerte, pero es inevitable no poder escribir sobre una película de un personaje tan fascinante como Cristina de Suecia. Primero, es necesario mencionar la versión norteamericana hecha ya en 1933 por el director Rouben Mamoulian dónde nos mostraba la historia de una Reina Cristina inteligente, valiente, fuerte protagonizada por la magnífica Greta Garbo. En aquella época era prácticamente imposible poder hablar abiertamente del tema de la diversidad sexual, pero el famoso pequeño beso de Cristina (Greta Garbo) en los labios de la Condesa Ebba, no nos dejaban duda que estábamos ante una Reina que sabía “comportarse como hombre” para el siglo XVII.

Cristina —según la visión y versión de este filme y su respectiva época— fue “salvada” gracias a la heteronorma por el Conde o embajador español Antonio Pimentel del Prado. Al final vemos esa Greta enamorada y segura de renunciar a un reino y su pueblo por el amor de un hombre. Pero bien, no es ese filme del que deseo hablar, sino de Reina Cristina La mujer que fue Rey/ Tyttökuningas / The Girl King (2015) dirigida por el finlandés Mika Kaurismäki. Esta nos muestra una Cristina más real, más adecuada a la historia y a los días de hoy. Es una cristina que brillaba no solamente por su inteligencia, valentía y fuerza sino por ese amor a la Condesa Ebba. De una forma brillante, entre una elegante banda sonora e imágenes el director nos lleva al mundo de Cristina, esa maravillosa mujer que se negaba a ser esposa y que sabía amar a las mujeres como a su país, que sabía que las guerras eran una pérdida de tiempo y la paz era mejor aunque la costumbre fuera ya esa. 

El conocimiento a través del arte, la academia y la cultura era capaz de transformar a las masas “La sabiduría es el pilar del reino” según creía Cristina. El director finlandés a través de este filme no solamente nos muestra claramente una relación de amor entre dos mujeres y la lucha por abstenerse a obedecer las heteronormas de lo que debería ser el deber de una Reina (casarse y parir un heredero), sino también los intereses eclesiásticos e hipócritas de la época. Pues nos muestra claramente que la iglesia católica acepta plácidamente en Roma a Cristina después de renunciar a su patria y el protestantismo. La acoge como una invitada especial aún a sabiendas de sus pasiones y se supone es una de las pocas mujeres enterradas junto a los Papas en Roma.

¿En verdad era lesbiana Cristina? No lo sé, pero de lo que si estoy segura es que ante esta película cualquier curiosidad es capaz de despertarse ante una mujer tan liberadora en esas épocas. Para las mentes cuadradas este filme podría verse muy ligera y una Cristina caprichosa y rebelde que prefería cuestionar lo que no debía ser cuestionado. Parafraseando la película, Cristina fue capaz de renunciar a lo que era por ser lo que quería. Se dice que Cristina siempre fue virgen ¿Qué es la virginidad? Supongo que nuevamente esto pone en tela de juicio la moral de la iglesia, cuando los intereses políticos y económicos están primero. Para este mes de la diversidad creo que vale la pena darle un vistazo a esta película, que definitivamente es interesante aunque sea por curiosidad para indagar más sobre la historia de esta mujer que deja claro que el poder de dirigir patrias o procesos no está en manos de los sexos ni de las preferencias, sino en las manos de seres humanos.

 


 

Lourdes Soto. Tegucigalpa, Honduras. Estudia el Máster en Relaciones de Género en la Universidad de Zaragoza, España. Fotógrafa, ha expuesto su trabajo en Honduras e Italia y en varios medios electrónicos. Su obra poética ha sido publicada en 7Lune,Italia; La Tribu de Frida, España y El BeiSMan, Estados Unidos, entre otros. Participó en las antologías poéticas Las de hoy, Honduras; Landais de Hispanoamérica La Luna e i Serpenti, Italia, y Chamote una Amalgama de voces poéticas de nuestra América, Argentina. Actualmente trabaja en su poemario En los brazos del tiempo.